El Pueblo rechaza la reforma constitucional que propone un grupo de legisladores mediante el proyecto de ley HB1074, que plantea reescribir la constitución estatal para reafirmar algo ya establecido por la ley: que solo los estadounidenses por nacimiento o naturalización pueden votar en el estado.
HB1074 es totalmente innecesario ya que votar sin ser ciudadano estadounidense ya es un delito grave en Carolina del Norte y los votantes deben demostrar su ciudadanía antes de registrarse para votar en el estado.
Quienes proponen esta reforma constitucional se basan en una retórica antiinmigrante ya que insinúan sin ninguna evidencia que los inmigrantes pueden ser una amenaza para la integridad del proceso electoral.
HB1074 solo va a crear división, miedo y confusión en el electorado y puede desanimar a los ciudadanos naturalizados estadounidenses a ejercer su derecho al voto en las elecciones de noviembre.
En lugar de impulsar reformas como HB1074, los legisladores deberían invertir su tiempo y los recursos de los contribuyentes a otorgar los fondos y el personal necesario para garantizar la integridad el proceso electoral y animar a todos los votantes elegibles, incluidos los inmigrantes naturalizados, a participar.
"Los inmigrantes que viven en Estados Unidos son personas trabajadoras de nuestras comunidades locales. Proceden de todas las clases sociales y, como todos nosotros, quieren sentirse seguros y tener la oportunidad de prosperar. Las afirmaciones falsas que sugieren que los inmigrantes colaboran con un partido político para influir en las elecciones son un intento de sembrar la desconfianza sobre los cimientos de nuestra democracia." - Iliana Santilla, directora ejecutiva de El Pueblo.